28 de enero de 2011

Ser dependienta

Que no dependiente, oiga! Como me aburro mucho viendo todo el día la tele y teniendo lo que es para mi gusto, demasiado tiempo libre, una amiga me "ayudó" a incorporarme a una tienda de ropa. Una de mis favoritas, la llamaremos MD. Aquellos avispados ya sabrán a qué mega tienda me refiero ;)

El caso es que me tocaba la sección de niños. Tengo las mañanas libres para poder terminar mi máster del universo y encontrar un trabajo, el horario perfecto.

El resultado de mi primera semana aquí es que se trata de un trabajo muy poco valorado. Hay que tener una paciencia para doblar una y otra vez lo mismo. Contestar amablemente, subir, bajar, doblar, colocar, cuadrar, sonreir.
Ahora que estoy al otro lado, puedo asegurar que hay un sinfín de cosas, de detalles que, como clientes, hacemos y que no tenemos en cuenta. Abrimos las prendas, las decolocamos, miramos las tallas y dejamos las cosas como en un vertedero. Preguntamos de malas maneras. Cuando ves un tienda puesta al milímetro , yo por lo menos tengo un poco de cuidado al buscar mi talla, sonrío y tal. Procuro ser amable porque las pobres hijas que están ahí trabajando lo agradecen de verdad.

Aun así, lo que más me duele no es doblar una camiseta diez veces ni subir cuatro veces a por diferentes tallas porque no se sepa qué talla se utiliza; lo que realmente es humillante son las personas que entran y ni dan los buenos días, ni saludan, como si fuésemos un mueble más del establecimiento.


Es sólo una reflexión que lanzo al aire, nada de reporches. Bueno, un poquito.

PASAD UN GRAN DIA!!

2 comentarios:

  1. Hay muchos estereotipos sobre las dependientas que no son verdad, no son todas bordes, quizá es que nosotros hacemos que lo sean con nuestro comportamiento y lo pagan con quien no deben, yo he visto a gente tratarlas fatal sin motivo; y cuando hablo yo con alguna diciendo "Gracias", "por favor" y sonriendo, me miran como si fuera una extraterrestre... qué le vamos a hacer, no todo el mundo es tan encantador como yo, jajaja.
    ánimo con tu nuevo trabajo!
    Tengo que pasarme más por tu blog, leñe!
    Besos
    Soni
    http://shoppingafternoon.blogspot.com/

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  2. Enhorabuena por el trabajo!
    Yo también soy amable (o intento) con los dependientes, dentro de 30 años seré como mi padre, que ordena los platos y cubiertos en los restaurante y poco le falta por llevarlos a la cocina ...

    Una duda de tu nuevo gremio, ¿la ropa acaba muy sudada/manchada de tanto ponerse y quitarse? ¿se lava alguna vez?

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